Fortalecimiento de los lazos entre Marruecos y China: Un encuentro estratégico entre el Príncipe Moulay El Hassan y Xi Jinping
El 22 de noviembre de 2024, el Príncipe Heredero Moulay El Hassan recibió al presidente chino Xi Jinping en Casablanca, en el marco de una visita oficial marcada por un acercamiento estratégico entre ambos países. Este encuentro, organizado bajo las instrucciones del Rey Mohammed VI, refuerza las relaciones bilaterales entre Marruecos y China, subrayando el creciente papel del Reino en la escena internacional.
La visita de Xi Jinping a Marruecos, tras su participación en la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Lima, demuestra la importancia estratégica de Marruecos a ojos de las grandes potencias mundiales, y especialmente de China. Esta escala marroquí ilustra el creciente interés de Pekín por un socio clave en el norte de África, cuyas fortalezas geopolíticas y económicas están siendo cada vez más valoradas.
El Príncipe Moulay El Hassan, heredero del trono marroquí, desempeñó un papel central en este encuentro, destacando no solo su creciente posición en los asuntos internacionales, sino también el peso diplomático de Marruecos. Esta visita a Casablanca se inscribe en un contexto donde el Reino de Marruecos se posiciona como un actor imprescindible para el desarrollo económico y político de la región.
Durante su encuentro, Xi Jinping y Moulay El Hassan intercambiaron sobre diversos temas de importancia bilateral, como la cooperación económica, infraestructuras e inversiones chinas en Marruecos. El principal objetivo de esta visita es consolidar la alianza estratégica entre ambos países, iniciada en 2016 con la visita del Rey Mohammed VI a Pekín.
China ve a Marruecos como un actor clave para sus ambiciones en África, especialmente en el marco de la Nueva Ruta de la Seda. Gracias a su ubicación geográfica y su rol como punto de conexión entre Europa, África y Oriente Medio, Marruecos es un socio privilegiado para el gigante asiático. Por su parte, Marruecos se beneficia de las inversiones chinas en sectores como infraestructuras y energía.
Además de los intercambios comerciales, el encuentro también permitió fortalecer la cooperación política y diplomática entre los dos países. Marruecos y China comparten intereses comunes en cuestiones de seguridad internacional, como la lucha contra el terrorismo y el crimen organizado transnacional. Asimismo, Marruecos apoya la posición de China en varios asuntos geopolíticos, lo que contribuye a un acercamiento aún más estrecho entre ambas naciones.
El Príncipe Moulay El Hassan también se reunió con altos funcionarios chinos, incluidos Li Changlin, embajador de China en Marruecos, y varios asesores económicos y diplomáticos. Estas reuniones permitieron poner en marcha iniciativas concretas para dinamizar las relaciones bilaterales, especialmente a través de asociaciones público-privadas y proyectos de infraestructuras conjuntas.
Este encuentro con Xi Jinping se produce en un contexto en el que Marruecos confirma su rol de líder regional. Además de su posición estratégica en el norte de África, el Reino es un actor clave en el mantenimiento de la estabilidad regional y la promoción del intercambio económico a nivel internacional. Hoy en día, Marruecos es un socio confiable para varias grandes potencias mundiales, incluidos Estados Unidos, Francia y Alemania.
En lo que respecta a la soberanía del Sahara Occidental, Marruecos sigue recibiendo el apoyo de numerosas naciones, incluida China. El modelo de autonomía propuesto por el Reino para este territorio es ampliamente considerado como la solución más creíble y realista para resolver este conflicto de larga data.
La visita de Xi Jinping a Marruecos simboliza el profundizamiento de las relaciones sino-marroquíes y la expansión continua de la influencia del Reino en la escena internacional. La cooperación entre los dos países, en áreas tan diversas como la economía, la política y la seguridad, debería intensificarse en los próximos años, contribuyendo así a la estabilidad regional y a un desarrollo económico compartido.
Marruecos, bajo el liderazgo del Rey Mohammed VI y con la creciente implicación del Príncipe Moulay El Hassan, sigue afirmando su rol como actor clave en un mundo multipolar, consolidando su posicionamiento entre África, Europa y Asia.
