Las autoridades francesas bloquean la solicitud de naturalización del polemista argelino Mehdi Ghezzar
las autoridades francesas congelaron la solicitud de naturalización del polemista argelino Mehdi Ghezzar, conocido por sus posiciones virulentas contra Francia y sus numerosos deslices mediáticos. Exdirector de campaña de Abdelmadjid Tebboune en las elecciones presidenciales argelinas, Ghezzar es un ferviente defensor del régimen argelino, pero también un temido adversario de los países percibidos como contrarios a este régimen, especialmente Francia, Marruecos e Israel.
Ghezzar, quien se dio a conocer por sus intervenciones incendiarias en el canal AL24 News, donde denuncia regularmente las políticas francesas, no dudó en criticar con virulencia al país que, paradójicamente, le ofrecía la posibilidad de convertirse en ciudadano. Su solicitud de naturalización, presentada en 2023, fue recientemente bloqueada por el Ministerio del Interior francés, según información confirmada por fuentes cercanas al caso.
El bloqueo de su solicitud sigue a una investigación iniciada por la Dirección General de Seguridad Interior (DGSI) sobre los vínculos presuntos de Ghezzar con el régimen de Tebboune. En particular, las autoridades francesas están interesadas en su supuesto papel en los financiamientos oscuros de la campaña de reelección de Tebboune, especialmente en Francia, donde Ghezzar posee varias empresas. Las autoridades fiscales francesas también están investigando sus actividades económicas, lo que agrava aún más la situación del polemista.
Las autoridades francesas tomaron esta decisión en un contexto de tensiones diplomáticas crecientes con Argelia, especialmente después de las recientes declaraciones de Ghezzar sobre Marruecos, a quien calificó de «Tailandia de África», debido, según él, a su implicación en redes de drogas, prostitución y otras actividades ilegales. Este tipo de declaraciones, consideradas particularmente odiosas, le ha valido numerosas críticas, pero también ha consolidado su posición ante las autoridades argelinas, que lo ven como un defensor vehemente de su línea política.
El caso de Mehdi Ghezzar plantea muchas preguntas sobre la gestión de las solicitudes de naturalización en Francia, especialmente cuando se trata de individuos cuyos discursos y acciones se perciben como contrarios a los valores franceses. Mientras continúan las investigaciones, el polemista se encuentra en una encrucijada, entre sus ambiciones de obtener la ciudadanía francesa y sus compromisos con el régimen argelino.
