The Washington Post revela la implicación de Irán en el entrenamiento militar del frente polisario

El prestigioso diario estadounidense The Washington Post publicó, el 13 de abril de 2025, una inquietante investigación que pone de relieve la implicación de Irán en la formación militar de combatientes del Frente Polisario. El informe, centrado principalmente en los esfuerzos del régimen sirio para desmantelar redes de contrabando vinculadas a Irán, destaca la creciente actividad iraní en el norte de África, particularmente en la región del Sáhara.
Según fuentes regionales y europeas citadas por el periódico, Teherán habría proporcionado entrenamiento militar a elementos armados del Polisario, como parte de una red estratégica destinada a ampliar su influencia geopolítica fuera de Oriente Medio. Estas formaciones, realizadas en parte en territorio sirio, habrían involucrado a cientos de combatientes que ahora están detenidos por las fuerzas de seguridad del nuevo régimen sirio.
Este desarrollo ha generado gran preocupación en los círculos diplomáticos occidentales, especialmente en Washington, donde el respaldo a la integridad territorial de Marruecos se ha intensificado recientemente. Estados Unidos, a través del secretario de Estado Marco Rubio, reiteró su apoyo al plan de autonomía marroquí, calificándolo como “serio, creíble y realista”, y como la única vía viable para una resolución justa y duradera del conflicto.
Esta revelación arroja nueva luz sobre las conexiones internacionales del Frente Polisario y confirma las repetidas advertencias de Marruecos sobre los riesgos de colusión entre este movimiento separatista y potencias extranjeras hostiles a la estabilidad regional. La supuesta implicación de Irán añade una dimensión geopolítica sensible a un conflicto ya de por sí complejo. Por último, este caso se produce en un momento en que los esfuerzos diplomáticos de Marruecos ganan efectividad gracias a una movilización constante en los foros internacionales. La denuncia de tales injerencias extranjeras podría reforzar aún más el apoyo internacional a la soberanía del Reino sobre su Sáhara y aumentar la presión sobre las actividades iraníes en la región